Si estás entrenando para restablecer tu salud física, no dejes de lado los ejercicios para mejorar la flexibilidad. Incluirlos en tu rutina de entrenamiento puede contribuir a aportar más elasticidad, reducir el riesgo de lesiones y aliviar ciertas molestias.
¿Qué son los ejercicios para aumentar la flexibilidad?
Es muy importante no confundir el calentamiento previo y los estiramientos posteriores a una sesión de entrenamiento con los ejercicios de flexibilidad. Son cosas diferentes, aunque parecidas. Con el calentamiento y el estiramiento ayudas a que el músculo se caliente o entre en estado de reposo, respectivamente. Son ejercicios de duración corta que no te llevan más de diez minutos.
Sin embargo, los ejercicios para aumentar la flexibilidad son específicos para estirar ciertos músculos del cuerpo. En consecuencia, se practican durante más tiempo y como parte de la rutina de entrenamiento.
¿Y por qué incluir los ejercicios de flexibilidad en tu rutina de entrenamiento? Permite adquirir muchas habilidades funcionales que te ayudarán a trabajar mejor en las máquinas y aparatos destinados a ganar masa muscular. Además, contribuyen a mejorar la calidad de vida, pues puedes doblar las piernas e incluso el cuerpo de forma más fácil y natural, algo que, a la larga, se agradece.
Los beneficios de los ejercicios para mejorar la flexibilidad
Reducir el riesgo de lesiones
Con los ejercicios de flexibilidad se aumenta la extensión del tejido muscular. Por eso este tipo de entrenamiento se incluye en las rutinas de gimnastas y bailarines, pero también en algunas prácticas como yoga y pilates. ¿Has visto el control que tienen las gimnastas sobre su cuerpo? ¿O las extensiones de las bailarinas de ballet? ¡Pues todo son ejercicios de flexibilidad!
Estos aportan al músculo capacidad para alargarse y, cuanto más se extienda el músculo, mayor capacidad de movimiento articular. Es decir, que necesitarás menos esfuerzo y energía para hacer un movimiento en concreto. En consecuencia, se previenen las lesiones.
Mejorar la postura
Cuando entrenas para ganar masa muscular puede ocurrir un acortamiento muscular. La postura y el equilibrio se ven afectados. Gracias a los ejercicios para mejorar la flexibilidad se puede corregir el acortamiento y alinear los músculos en su lugar original. Si pasas muchas horas sentado o de pie y si tienes problemas en la espalda, estos ejercicios contribuyen a una buena postura mientras alivian los dolores de lumbago o cervicales.
¡Muévete como un niño!
Los niños tienen la habilidad de moverse fácilmente y parecen nunca cansarse. Y no es por la flexibilidad precisamente, sino porque tienen amplia capacidad de movimiento. Los ejercicios de flexibilidad ayudan a restaurar esta capacidad y tener mayor rango de movimientos.
No solo podrás entrenar y moverte fácilmente, sino que también puedes iniciarte en otros deportes como el fútbol, baloncesto o natación, que requieren mucho movimiento de músculos y articulaciones. El entrenamiento de flexibilidad contribuye a la relajación física, psicológica y a la liberación de endorfinas.
Ejercicios para aumentar la flexibilidad
Estiramiento dinámico
Su objetivo es hacer movimientos repetitivos y muchas veces, lo que se conoce como series de ejercicios. Pero tienen la característica de utilizar movimientos pendulares. Por ejemplo, de pie, separar las piernas y doblar la espalda, intentando tocar la punta de los pies con las manos. Desde esta postura puedes hacer muchos ejercicios que no solo aportan flexibilidad a la espalda, sino también a las piernas. La clave está en regresar a la posición original y repetir varias veces.
Estiramiento estático
Se trata de mantener el cuerpo en una misma postura durante unos segundos, mientras se alargan los músculos. El ejercicio dinámico anteriormente descrito puede convertirse en estático si permaneces en la misma postura durante 30 segundos.
Posturas de yoga
Algunas posturas de yoga también son ideales para ganar flexibilidad. El perro boca abajo y el saludo al sol son idóneas. Gracias a ellas se puede entrenar el cuerpo de forma integral, pues se trabajan buena parte de los músculos y articulaciones. Recuerda estirar al máximo y controlar la respiración. ¡Verás muy buenos resultados!
Mejorar la flexibilidad para la prevención y alivio de lesiones
Como ya hemos adelantado, el entrenamiento de flexibilidad se recomienda a muchas personas con problemas en los músculos y articulaciones. Por ejemplo, una lesión en la rodilla o una tendinitis; también para aquellos que llevan una vida sedentaria y que han desarrollado lesiones en la espalda (lumbago, cervicales, cuello, etcétera).
La flexibilidad contribuye en ellos a sentir alivio en dichas lesiones que se acompañan de algo de dolor; mientras se corrige la postura y se restaura la posición de los músculos de forma paulatina. Para hacer estos ejercicios es recomendable utilizar productos como Fisiocrem Gel Active, que contribuye a la preparación de los músculos. Con un masaje rápido, podrás activar los músculos y ligamentos para una sesión de flexibilidad. Pero no solo se recomienda para las personas que ya tienen una lesión, sino también para la prevención de las mismas. Gracias a Fisiocrem Gel Active la zona estará relajada y lista para entrenar. Contiene caléndula, árnica, hypericum y melaleuca.
Otra alternativa es Fisiocrem Parche Active, que envía microcorrientes para aliviar molestias musculares, articulares y contracturas. Es un parche de dos capas que, al entrar en contacto con las sales minerales de la piel, libera microcorrientes que aportan alivio. ¡Una solución efectiva para el tratamiento del dolor muscular y articular!
